El 4 de febrero es el Día Mundial del Cáncer, una oportunidad para pensar, concientizar, comprometerse y movilizar a la sociedad para avanzar en la prevención y control del cáncer. Bajo el lema “Por unos cuidados más justos” se busca focalizar en la necesidad de sumar más equidad al abordaje del cáncer, ya que las medidas no son iguales para todos, y cada problema requiere una solución diferente. La igualdad es dar a cada persona lo que necesita para que estén todos al mismo nivel.

La única forma de reducir las tasas de mortalidad por cáncer es mediante el trabajo en forma conjunta entre personas, instituciones, organizaciones y gobiernos, que posibiliten la accesibilidad y la difusión de acciones que deben llevarse a cabo para tratar a una persona a tiempo y reducir la mortalidad por esa enfermedad.

En el Partido de La Costa, el sistema de salud garantiza el abordaje integral del cáncer y brinda acceso a tratamientos de calidad. Es clave tener en cuenta algunas recomendaciones que promuevan un mejor trato hacia quienes presentan un diagnóstico oncológico.

Cuando hablamos de cáncer nos referimos a un amplio grupo de enfermedades que comienzan en las células. El cáncer puede empezar casi en cualquier lugar del cuerpo, debido a que nuestro organismo está formado de muchos tipos de células. Normalmente, las células crecen y se dividen para producir nuevas que son indispensables para mantenernos sanos. Algunas veces este proceso se descontrola: nuevas células se siguen formando cuando el cuerpo no las necesita y otras viejas no mueren cuando deberían hacerlo, formando una masa de tejido llamado tumor.

Los tumores pueden ser benignos o malignos. Los benignos no son cancerosos ya que las células de este tipo de tumores no se diseminan a otras partes del cuerpo, generalmente se pueden extirpar y en la mayoría de los casos no reaparecen. Los tumores malignos son cancerosos, dado que sus células tienen anomalías, se dividen sin control, pueden invadir y destruir el tejido a su alrededor, entrar al torrente sanguíneo o al sistema linfático y diseminarse a otros órganos.

PREVENCIÓN

Varios tipos de cáncer pueden prevenirse. Otros pueden detectarse tempranamente lo que favorece las posibilidades de curación. Ante un diagnóstico de cáncer, siempre hay algo por hacer.

Algunos tipos de cáncer pueden prevenirse siguiendo hábitos saludables y en otros casos, puede reducirse el riesgo de enfermar. Las principales pautas que se recomiendan son:

-Adoptar una alimentación saludable basada tanto en el consumo diario de frutas y verduras (al menos cinco porciones por día) y de legumbres, cereales integrales y frutos secos, como en la reducción del consumo de fiambres, embutidos, manteca , leche entera y de productos de pastelería, snacks y golosinas, entre otros.

-Realizar actividad física todos los días, al menos 30 minutos.

-Evitar el consumo excesivo de alcohol (más de dos vasos de vino o 350 cc de cerveza por día).

-Evitar la exposición al sol entre las 10 y las 16 horas y utilizar protectores solares y ropa que proteja la piel. Estas medidas deben extremarse especialmente en los grupos más vulnerables: niños menores de 3 años y personas de piel blanca, cabello y ojos claros. Es importante seguir estas recomendaciones no solo en verano sino en todo el año.

-Usar preservativo en todas las relaciones sexuales para reducir el riesgo de infecciones de transmisión sexual como el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), asociado con la probabilidad de desarrollar Linfoma y Sarcoma de Kaposi y el Virus del Papiloma Humano (VPH) asociado con cáncer de cuello de útero. Es importante aclarar que dado que el VPH se transmite por contacto sexual (por ejemplo, manos en contacto con zonas genitales), el uso del preservativo no evita totalmente su transmisión.

-Evitar el tabaco y mantener los ambientes libres de humo.

CONTROLES Y DIAGNÓSTICO

Los controles médicos frecuentes son fundamentales para detectar a tiempo el cáncer, dado que en sus etapas iniciales la mayoría de los tumores son asintomáticos.

La detección temprana al diagnosticar la enfermedad en las primeras fases para dar un tratamiento más efectivo, al inicio de los síntomas o si es posible, antes de su desarrollo, cuando el tumor está localizado en el órgano de origen, sin invasión de otros tejidos vecinos.

Un diagnóstico de cáncer no es sinónimo de dolor y muerte. Más de la mitad de las personas con cáncer se curan y en otro porcentaje importante se convierte en una enfermedad controlada, que permite llevar una buena calidad de vida.

Los síntomas, tratamientos y evolución son diferentes en cada persona. No se puede comparar el proceso por el que pueden estar pasando dos personas que tienen el mismo diagnóstico de cáncer, ya que su evolución está sujeta a múltiples factores.

La mayoría de las personas que desarrollan cáncer pueden llevar una vida prácticamente normal. A veces, cuando se inicia un tratamiento, el paciente debe ser hospitalizado durante un tiempo para controlar más fácilmente los efectos secundarios de la terapia, y aunque algunos tratamientos requieren temporalmente más reposo y descanso, la mayoría puede seguir realizando las actividades diarias habituales.

El cáncer puede tratarse con cirugía, radioterapia, quimioterapia, terapia hormonal o terapia biológica. El médico puede usar un método o una combinación de éstos, en base a la edad y salud general del paciente, el tipo y ubicación del cáncer y el nivel de extensión de la enfermedad entre otros factores.

La entrada Bajo el lema «Por unos cuidados más justos», el Partido de La Costa adhiere al Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer se publicó primero en Prensa La Costa.